El Juzgado Civil y Comercial de 6° de Río Cuarto dictó finalmente las sentencias verificatorias de los créditos de los concursos preventivos de Compañía Argentina de Granos (Cagsa) y Molino Cañuelas (ambas empresas del Grupo Cañuelas controlado por la familia Navilli).

El listado completo de acreedores –que por una cuestión de orden se clasificó en “financieros”, “fiscales” y “bienes y servicios”– es gigantesco y abarca prácticamente todos los rubros económicos.

Al considerar, según el criterio de los síndicos del concurso, los créditos verificados o admisibles –sin considerar aquellos comprendidos en la categoría de condicional–, se observa que los tres primeros lugares están ocupados por entidades financieras, una de las cuales, con una deuda de 18.807 millones de pesos, corresponde a la entidad oficial Banco Nación, es decir, a todos los argentinos.

Según lo estipulado por el artículo 19 de la Ley de Concursos y Quiebras, las deudas en moneda extranjera se calcularon en pesos argentinos con el tipo de cambio de la fecha de la presentación del informe de los síndicos al efecto del cómputo del pasivo concursal.

El cuarto lugar del ranking de acreedores del Grupo Cañuelas lo ocupan tres sociedades controladas por la estadounidense Cargill con una deuda de 10.420 millones de pesos, seguido por otra entidad oficial, Banco de la Provincia de Buenos Aires, con 9784 millones de pesos.

Está claro que la familia Navilli tenía buenos contactos con el mundo financiero porque los siguientes trece puestos del ranking de acreedores lo ocupan entidades financieras y bancarias tanto internacionales como locales.

La sorpresa es que en el puesto 19 aparece el propio Molino Cañuelas como acreedor de Cagsa por un monto verificado de 5248 millones de pesos, además de otros 2,92 millones de dólares en carácter condicional.

Si bien los representantes legales de Molinos Cañuelas habían solicitado que se le reconozca una acreencia de Cagsa por un total de 10.195 millones de pesos, los síndicos solamente validaron deudas por poco más de la mitad de esa cifra, la mayor parte de las cuales corresponden a liquidaciones de granos no cobradas.

También aparece (¡sorpresa!) Moinho Canuelas, sí, la filial brasileña del Grupo Cañuelas con una deuda equivalente a 13 millones de pesos.

En los puestos 20 a 22 del ranking aparecen nuevamente tres entidades financieras internacionales, para dejarle la posición 23 a la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) con 2827 millones de pesos.

Nuevamente, en los puestos 24 a 28 del extenso ranking de acreedores concursales figuran entidades financieras y bancarias, para recién, en el puesto 29, observar la presencia del estadounidense Nitron Group, una compañía comercializadora de fertilizantes a escala mundial.

Es destacable el perfil internacional de los acreedores del Grupo Cañuelas, donde figura el grupo chino de agroquímicos Shandong Rainbow, la alemana Reifenhauser Blown Film y la brasileña Bio Srpinger Do Brasil Industria de Alimentos.

El proceso de verificación de créditos tiene como objetivo el reconocimiento de las deudas que tiene que afrontar la empresa o grupo concursado. 

Fuente: Bichosdecampo.com