La brutal sequía que que atraviesa el país está generando nuevos paisajes en la pampa húmeda en la provincia de Buenos Aires.
La brutal sequía que que atraviesa el país está generando nuevos paisajes en la pampa húmeda en la provincia de Buenos Aires.

En efecto, algunas lagunas quedaron literalmente sin agua mientras que otras quedaron de escurrir, lo que puso en jaque el caudal de los ríos que encadenan los espejos y algunos ya no tienen correntada. Por ejemplo, en estas últimas semanas ocurrió un fenómeno preocupante en el partido de Junín, más precisamente en el Salado, a raíz de la falta de lluvias, un fenómeno que golpea al país desde hace más de un año, tanto a la producción agropecuaria, como a los ecosistemas naturales.
Según pudo constatar el portal Democracia, debido a la bajante, se secó el vertedero de la Mar Chiquita, donde están las compuertas y dejó de entrar agua a la laguna Gómez, cuya cota sigue en descenso.
El fenómeno denominado La Niña, por falta de precipitaciones, también asola otras lagunas de la cuenca del Salado como las de Lobos y de Chascomús mientras que la de Navarro está completamente seca en tanto que la de Monte está al menos un metro por debajo de su nivel normal.
En ese sentido, Chascomús registra una bajante con sectores que no tienen una gota de agua, una
situación que se repite en su conectada, la laguna Vitel, donde solo hay tierra a la vista.
Los reportes hablan de “desastre ecológico” en tanto que los expertos anticipan que “el agua va a volver,
pero la fauna y la vegetación va a tardar” en regresar a la normalidad tal como en la laguna Indio Muerto
de Saladillo y otros sistemas lacustres de 25 de Mayo, Roque Pérez, Bragado, Las Flores y Villa Cañas,
entre otras.
Según estudios de técnicos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), “se prevé el fin
del fenómeno de La Niña para febrero” por lo que las precipitaciones ayudarían a recomponer el
escenario en el que actualmente apenas llueven 500 milímetros de los algo más de mil que se precipitan
anualmente.
Navarro, sin agua, desde hace varios meses, uno de los reservorios de agua que más sufre la sequía es la laguna de Navarro, que se quedó sin agua. Tal es así que a fines de 2022 la Municipalidad aprovechó la situación para realizar tareas de limpieza con máquinas dentro del mismo espejo.

