LA «BRONCA DIARIA» Y EL TERROR DEL TREN DELANTERO

Desde algunos años en calle 1° de Mayo al 350, hay una importante rotura del pavimento de todo el ancho de la calzada. Los vehículos que circulan no tienen alternativa para evitarlo.
“Hay que pasar más lento que a paso de hombre” dijo un automovilista que pasa todos los días obligatoriamente por allí.
“A la bronca de tener que pasar varias veces por el paso a nivel destruido que destroza los autos, hay que sumarle esto! Circular por acá cada día es más difícil. Uno no gana para calenturas!” dijo Jorge, vecino de la zona.


Consultado un especialista en obras viales, opinó que “hace mucho ha estallado la junta de dilatación entre dos de los paños de pavimento. Esta junta es un espacio que generalmente se rellena con telgopor o materiales elásticos fácilmente contraíbles para permitir la dilatación del pavimento en épocas de cambios bruscos de temperatura. Al no cumplir su objetivo la estructura se comporta rompiéndose de esta forma.”
Lo cierto es que la espera a veces de cargueros detenidos justo sobre el paso a nivel, o pasando a escasísima velocidad, se suma al conjunto de malos tratos que sufren automovilistas y vehículos. Un mecánico especializado en tren delantero que tiene su taller en las cercanías, indica que “generalmente con los pozos, o los lomos de burros o el pavimento roto no solamente se desalinea el tren delantero o desbalancean las ruedas, sino que pueden dañarse piezas del automotor. Si un vehículo del centro se controla una vez al año, quien viva de este lado de la vía debe hacerlo cada cuatro meses.”
Si bien las molestias y los desperfectos que ocasiona en autos y sus dueños son importante, la solución no es extremadamente costosa. No es una obra colosal la que debe llevarse a cabo. Es de esperar que sea reparado pronto. Si pensamos en las importantes obras de pavimentación que se han iniciado, inaugurado o están en construcción, es inexplicable que esta rotura no se arregle!
