SIGUE LA IMPUNIDAD DE LOS DELINCUENTES Y YA MUCHOS VECINOS SE AUTOAYUDAN

Domingo 8.00 de la mañana. Mientras la gente corriente descansa o planea el paseo semanal la delincuencia impune se maneja cómodamente entre las propiedades privadas de la ciudad. Este domingo a las 8.01 sonó la alarma en el Campo deportivo El Campín de Pellegrini y Tucumán. El casero del lugar, suponiendo que algún perro u otro animal habrían disparado los sensores desconectó la campanilla y siguió descansando junto a su hijo. Lejos estaba de imaginar que tras un paredón o arboleda se escondía un delincuente al acecho.

Pasaron 35 minutos y el malvivente salió de su escondite y fue directo a un tendedero de donde sacó un acolchado y se lo llevó como escaso botín. Allegados a la víctima dijeron que seguramente el ladrón no estaría en la plenitud de sus facultades, o estaría bajo efectos de alguna sustancia prohibida. No puede entenderse que un domingo tan temprano un chorro se exponga por tan poco saldo a llevarse. De todos modos fue una suerte que el casero y su hijo no advirtieran al visitante por el riesgo que hubieran corrido. Hay que poner en alerta a la comunidad, la cara del tipo quedó registrada. Evitemos que otros sean víctimas del mismo ladrón.