YA SE ADVIERTE EL INCREMENTO EN LAS CARNICERÍAS
La escasez de hacienda, que se redujo un 15% en el Mercado Agroganadero de Cañuelas, adelantó una suba de precios que se esperaba para febrero. Desde hace 15 días, la menor oferta de ganado ha impactado en los valores, llevando el precio del novillito por encima de los $3000 el kilo. Se estima que el incremento en el mostrador será de entre un 5% y un 7%, lo que equivale a subas de $1000 a $1200 por corte. Algunos comercios ya reflejan estos aumentos.

La suba responde a una combinación de factores: la baja en la oferta, el fortalecimiento de la demanda y el retraso de los precios respecto a otros productos. La faena de enero muestra una caída del 5% interanual, especialmente en vacas y novillos. Además, se proyecta que en 2025 la producción de carne disminuirá entre un 6% y un 7%, es decir, unas 200.000 toneladas menos. Esta situación se debe a la liquidación de stock en 2024 y a la sequía previa, aunque podría marcar el inicio de un período de retención si las condiciones climáticas mejoran.
Los especialistas prevén que la menor disponibilidad de carne se prolongue por al menos dos o tres trimestres, impulsada por una demanda firme y una exportación sin restricciones. Aunque la carne aumentó un 12,9% en diciembre, en 2024 su ajuste total fue del 81%, quedando por debajo de la inflación general del 117,8%. A pesar de la suba actual, los analistas consideran que el mercado absorberá el impacto sin mayores dificultades.
