Vuelve una de las noches más especiales del año: Halloween. Entre calabazas, brujas, fantasmas y zombis, pequeños y no tan pequeños tomarán las calles de pueblos y ciudades la noche de este 31 de octubre. Niños, y adultos se pondrán sus disfraces más exóticos.  La celebración previa al Día de Todos los Santos cada vez gana más adeptos en nuestro país, convirtiendo esta fecha en algo especial. En varios puntos del planeta familias y amigos pasarán una noche mágica con los ingredientes fundamentales para disfrutar a lo grande: buena compañía, sabrosos alimentos y actividades divertidas.

Los disfraces, el alma de la fiesta

Algo imprescindible que no puede faltar en toda fiesta ya sea de niños o de adultos, son los disfraces>: Calabazas andantes, zombis, vampiros, hombres lobo o brujas son algunos de los protagonistas en esta noche. Los adultos también buscan aparentar con su fisonomía más aterradora y algunos tratan de añadir una chispa de originalidad y humor a sus atuendos. Los más manitas se atreven también a realizar sus propias confecciones y ahorrar así algo de dinero.

¿Por qué se celebra Halloween?

El término ‘Halloween’ proviene de ‘All Hallows Eve’ que, traducido a nuestro idioma, significa ‘Víspera de todos los Santos’. Otras formas de referirse a esta festividad son ‘Samhain’ o ‘Noche de Brujas’.

Estados Unidos es el país más desmesurado y curioso a la hora de festejar esta noche, pero los orígenes de Halloween, al contrario de lo que muchos piensan, se encuentran en nuestro continente, gracias a los celtas.

Los orígenes de Halloween se relacionan con la festividad celta de Samhain, que marcaba el final de verano, la recogida de las cosechas y el comienzo del Año nuevo celta.

Los celtas creían que, en la festividad de Samhain, las líneas que separaban el mundo de los vivos y el de los muertos se estrechaban, hasta el punto de que ambos podían converger, permitiendo que los espíritus pudieran llegar al plano terrenal. De hecho, invitaban a los familiares ya fallecidos e intentaban ahuyentar a los espíritus malignos, usando trajes y máscaras para asustarles.

Festividad pagana

Esta festividad meramente pagana comenzó a transformase cuando el cristianismo intentó asumirla en su calendario. Concretamente, los papas Gregorio III (731-741) y Gregorio IV (827-844) intentaron suplantar Samhain por el Día de Todos los Santos.

No obstante, el auge de Halloween llegaría más tarde. A mediados del siglo XIX, desembarca en el continente americano gracias a los numerosos inmigrantes irlandeses que llegaron a Estados Unidos y Canadá. Allí es donde la fiesta como se conoce hoy en día.

En el caso del famoso ‘truco o trato’, los celtas creían que un espíritu maligno iba de casa en casa durante esta noche pidiendo ‘truco o trato’, si el trato no se cerraba, el espíritu realizaría un truco maldiciendo a los habitantes de esa casa.

Fuente: ElDiaTenerife