ORACIONES, MENSAJES Y DESEOS DE RECUPERACIÓN OCUPAN A UNA GRAN CANTIDAD DE PERSONAS PENDIENTES DE SU SALUD

El caso de Agustín es uno de esos, que no suceden siempre, que despiertan el interés y el afecto generalizado de muchísima gente. Incluso de una gran mayoría que no lo conoce personalmente. Es que no sólo la desventura y lo trágico de su accidente sensibiliza a los cañuelenses. Desde que los medios publicamos su imagen, su cara transmite la bondad y don de gente que despierta cariño.

Sus amigos y allegados interactúan intensamente en las redes en cada publicación que tenga que ver con el chico. Las muestras de apoyo y solidaridad se renuevan a cada momento.

Pero sobre todo las oraciones, las palabras de fe de todos los creyentes, acompañan la recuperación de la salud que no será breve ni fácil. Pero el «pibe» está dando la batalla como un guerrero. Y además está acompañado y protegido por los que, aseguran, conforman un equipo de profesionales de la salud de primera en el Hospital Regional Cuenca.