Sarah Siegel ya tiene su propia caballeriza en Cañuelas y su equipo de polo donde también juega Mía Cambiaso

 

Dueña de un espíritu libre, Sarah Siegel-Magness es del tipo de mujer que arriesga, sigue sus instintos y que no duda en ir detrás de sus pasiones. Nacida en Colorado y diplomada en Business en la universidad de esa ciudad, tuvo una primera etapa laboral en la discográfica EMI, en Nueva York, siguió con la moda (creó la marca Solow, que le valió que a sus 30 la eligieran la Emprendedora del Año), y el cine fue su siguiente desafío: además de dirigir Crazy Kind of Love, produjo, entre otras, la película Precious, ganadora de dos premios Oscar y nominada en seis categorías. Ella, incluso, llegó a ser nominada junto a su marido, Gary, en la categoría Mejor Producción. Pero un día conoció el polo y su vida cambió para siempre.

Hoy, sentada en el living de sus caballerizas en Cañuelas, adonde llegó de la mano de sus grandes amigos Adolfo Cambiaso María Vázquez, cuenta cómo fue el recorrido que la llevó de Hollywood a Buenos Aires para echar raíces y hasta tener su propio equipo de polo. “Amo este país, su gente, la creatividad y, por supuesto, que hay caballos por todos lados”.

Me encantaba venir, pero sólo se me ocurrió cuando Adolfo me dijo que había unas caballerizas en venta. Me quedaba en el Hyatt y era agotador ir y volver. Y si de verdad querés jugar al polo tenés que vivir en Argentina al menos tres meses al año. Ahora tengo mi propio equipo, Dundas, que pronto se va a llamar 90210 Polo, como la serie de televisión de hace unos años. Ese es el código postal de Beverly Hills, donde vivo.