ES A RAÍZ DE CASOS EXTRAÑOS DETECTADOS EN EL MUNICIPIO DE BERAZATEGUI
Entre las primeras tres semanas del mes de enero de 2023 fueron notificados cuatro casos de adultos internados por diarrea aguda, tres de ellos en el Hospital Evita Pueblo y uno en una clínica privada, ambos establecimientos del municipio de Berazategui. Los casos presentaban antecedentes de ingesta reciente de carne y derivados. Frente a la situación descrita el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, conjuntamente con el Municipio de Berazategui, emite la siguiente comunicación con el objetivo de sensibilizar la vigilancia epidemiológica de casos y enfatizar el manejo seguro de alimentos para la población.
Qué es una ENFERMEDAD TRANSMITIDA POR ALIMENTOS
Las enfermedades transmitidas por alimentos (ETA) son intoxicaciones o infecciones provocadas por el consumo de agua o alimentos contaminados con microorganismos o parásitos, o bien por las sustancias tóxicas que estos producen.
En este marco, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) lanza la campaña “No comprometas tu salud” destinada a prevenir las infecciones y las intoxicaciones alimentarias entre los consumidores.
Las infecciones se producen por la ingestión de alimentos que contienen microorganismos vivos perjudiciales para la salud como virus, bacterias y parásitos.
Las intoxicaciones se producen por la ingestión de toxinas o venenos que se encuentran presentes en el alimento ingerido, producidas por hongos o bacterias. Las ETA constituyen un importante problema de salud a nivel mundial. Por eso, el Senasa controla los procesos de inocuidad y calidad de los alimentos argentinos, tanto en la materia prima como en los productos, subproductos y derivados de origen animal y vegetal.
Los principales síntomas que generan son trastornos gastrointestinales como dolor abdominal, diarreas, náuseas y vómitos, a veces acompañados de fiebre. También pueden presentarse síntomas neurológicos, ojos hinchados, dificultades renales y visión doble, entre otros.
La duración e intensidad de estos síntomas varía de acuerdo a la cantidad de bacterias o toxinas presentes en el alimento, a la cantidad consumida del alimento y al estado de salud general de la persona.
Recomendaciones a la población:
● Utilizar agua segura. Si no es agua de red: agregar dos gotas de lavandina por
litro de agua o hervirla de 2 a 3 minutos, o utilizar pastillas potabilizadoras.
● Practicar costumbres de higiene como lavado de manos con agua y jabón
después de ir al baño, después de cambiar los pañales y, las madres, antes de dar
de mamar. También antes y después de preparar alimentos (en especial después
de tocar carne cruda) y consumirlos.
● Mantener la higiene en la preparación de alimentos.
● Utilizar alimentos frescos, limpios, bien cocinados y recientemente preparados.
● Lavado de vegetales: Lavar y desinfectar cuidadosamente con agua segura
frutas y verduras sobre todo si se consumen crudas y en lo posible, pelarlas.
● Cocinar bien los alimentos: los huevos hasta que tengan consistencia dura. Si los
huevos tienen olor o sabor extraño, no consumirlos.
● Las carnes deben estar bien cocidas por dentro y por fuera, hasta que pierdan
totalmente el color rosado, teniendo especial cuidado con la carne picada,
hamburguesas, albóndigas, empanadas, pastel de carne, achuras, etc. Cocción
correcta: Cocinar completamente hasta que no queden partes rosadas en su
interior y sus jugos sean claros (mínimo 71°C en el centro de la pieza).
● Si la carne tiene mal olor al momento de prepararla, o perdió la cadena de frío, no
consumirla. Las carnes no deben descongelarse más de una vez en caso de haber
sido frizadas.
● No usar el mismo cuchillo, tabla o mesada donde se apoyó carne cruda para
cortar otros alimentos, sin antes lavarlos con agua y detergente.
● Evitar la contaminación cruzada: En las áreas de preparación de alimentos limpiar
y desinfectar las superficies, las tablas de cortar y los utensilios después de que
hayan tomado contacto con carne cruda y/o sus jugos.
● Separar las carnes crudas y/o sus jugos de los alimentos listos para consumir
principalmente durante la compra, el almacenamiento y la preparación de los
mismos.
● Consumir leche, derivados lácteos y jugos que estén pasteurizados.
● Conservar alimentos frescos y cocidos en la heladera.
● Evitar la ingesta de medicamentos sin indicación médica e infusiones caseras.