LA DIFÍCIL TAREA DE SER PRESA DE EDESUR

Cañuelas centro, Alejandro Petión, Los Campitos, Los Pozos, Santa Anita, Villa Vissir y algunas zonas rurales del distrito fueron protagonistas de un brutal corte del suministro de energía eléctrica por parte de la prestadora Edesur, empresa monopólica de prestación del servicio. Una cantidad de usuarios que Edesur estimó en 6.200 pero que algunas fuentes establecieron en unos 8.000, fue privada de energía eléctrica durante 19 horas. Desde la madrugada de ayer martes hasta las 19.30 en que se comenzó a normalizar la situación, una gran cantidad de ciudadanos locales sufrieron las consecuencias del cruel corte de la corriente.

Según trascendió el inconveniente se originó en la subestación transformadora ubicada sobre calle Alem en la que se dañaron elementos sensibles y cuya rotura no se produce normalmente. La eventual reparación no tiene previsiones de reparaciones preventivas. La empresa, que no tiene control del Estado a pesar de existir el ENRE, Ente Regulador de la Electricidad, no realiza ni ha realizado en tiempo y forma las inversiones financieras necesarias para contar con una adecuada infraestructura que le permita brindar el servicio a sus clientes cautivos. Como es sabido es una empresa monopólica, ya que no existe la posibilidad de elegir a quien comprar la energía.

Ayer durante todo el día pudo verse usuarios domiciliarios o comerciantes protestando permanentemente con una sensación muy grande de impotencia al ver que nadie escuchaba los reclamos ni se daban explicaciones y menos previsión de hora de normalización. Gente con problemas de salud, particularmente, fueron rehenes obligados de la prestataria y de un estado inexistente para acompañar a los ciudadanos.

Edesur, al igual que otras empresas prestadoras de servicios públicos, completa su menú de opresión a los clientes cobrando facturas extra terrenas sin que se tenga la posibilidad de comprobar si los valores son correctos o no. Primero hay que pagar las exorbitantes facturas y después reclamar. Claro, hay que tener sobre todo las personas menos solventes, los montos a veces extraordinarios que se facturan. El después se reclama es «nunca le van a devolver su dinero». No existe posibilidad de que prospere un reclamo.

En fin, es difícil ser usuario de Edesur y más en un País particular como la Argentina.