UNA MUJER QUE TAMBIÉN DEPENDE DEL MUNICIPIO ES LA DENUNCIANTE Y ESTÁ PROTEGIDA POR LA JUSTICIA. INTERVINO EL SERVICIO DE NIÑEZ

Un hombre de 48 años, a quien llamaremos N, empleado de la Dirección de Deportes y a cargo de una de las escuelitas de fútbol, fue denunciado judicialmente por una mujer, de 43 años y también dependiente laboralmente de la Municipalidad. (A la mujer la llamaremos S para preservar su identidad). La presentación en el Juzgado de Paz fue realizada a fines de abril, y por las características de la denuncia tomó intervención además el Servicio Local de Niñez. La demanda según consta en el expediente es por Violencia y Maltrato Familiar.

El Hecho

S es actualmente esposa de quien es padre de los hijos de la actual mujer de N. En conocimiento que los hijos de su actual pareja sufrirían maltratos en el ámbito familiar, S fue a conversar con la actual mujer del denunciado con quien mantenía, hasta ese momento, muy buena relación. Al presenciar el hombre la charla de ambas mujeres, estalló de ira ante lo que calificó de mentiras y maltrató verbalmente y amenazó con golpear , al menos, a S.

La denunciante S, procedió a realizar la correspondiente denuncia, a partir de lo que El Juzgado de Paz resuelve dictar varias medidas precautorias y la intervención urgente del Servicio de Niñez. Prohibición de acercamiento, cese de todo acto intimidatorio o violento, perimetral, botón anti pánico y orden de tratamiento psicológico fueron las urgentes decisiones de la Dra. Rivarola.

Ante toda esta situación compleja de violencia y haber supuestas víctimas menores, El Servicio de Niñez determinó el apartamiento preventivo del trabajo de quien es entrenador de una de las escuelitas de fútbol del área de deportes. A pesar de la medida, N continúa presentándose en la cancha intentando retomar su tarea con los niños, desconociendo el desplazamiento que hizo el Municipio por orden superior.

El hombre, que sería militante activo del partido de gobierno, estaría generando problemas operativos al Área de Deportes, al presentarse de malos modos a intentar retomar su actividad. La Municipalidad, no puede resolver la situación, ya que sólo cumplió órdenes judiciales de apartarlo del trato con menores.

Hasta ahora, las medidas tomadas son preventivas y cautelares y ambos involucrados deberán argumentar a efectos que la Justicia trate el tema de fondo.