JUNTAN FIRMAS PARA QUE NO SE HABILITE URBANA 66
Que Uribelarrea se ha convertido en un sitio con magnetismo para cada vez más visitantes no es un secreto para nadie. Que tiene el encanto de sus casas de más de cien años, una plaza pintoresca, paisajes bellísimos, una Parroquia cálida y acogedora, la primera Escuela Salesiana Agrotécnica, locales gastronómicos de nivel y otros atractivos que agiganta su atracción turística tampoco es secreto. Pero no es menor advertir que Uribelarrea mantiene aún la paz del paisaje de campo y de pueblo, la tranquilidad de todo sitio aún no ganado por las inclemencias delictuales del Conurbano y condiciones de seguridad que hasta hoy son buscadas por cada día más personas que huyen del AMBA.
Además, seguramente lo más destacable sea que Uribelarrea guarda la honorabilidad de una cantidad de familias tradicionales de las que ya viven segunda y terceras generaciones, personas de intachable honestidad y prestigio que, a pesar de querer mantener las virtudes del turismo, también quieren que permanezcan aquellas bondades que enumeramos un párrafo antes.
Precisamente como quieren mantener esa paz y esa tranquilidad se indignan ante hechos como el del menor borracho que al salir de la bailanta entró a robar a una vivienda, el de los rateros, y el de los revoltosos que pululan, dicen, muchas veces antes, durante o después del funcionamiento bailantero que funciona en la Sociedad de Fomento. La misma que comenzó a abrir allí en junio luego de irse de Los Aromos.
Paralelamente la gente de Uribe considera que la Sociedad Fomentista se debe a la realización de actividades de interés social, cultural y deportivo para chicos primero y luego para adultos. Que nada tiene que hacer vinculándose con empresas comerciales que nada suman al desarrollo integral de los chicos y tampoco de adultos. Confían en que solicitando el cierre al municipio y además con la regularización de la Configuración de la CD de la Sociedad de Fomento evitarán males mayores como, entre otros, el ingreso de sustancias indeseadas por todos y de hábitos que se dan de bruces con la Comunidad Uribelarrense.