CAÑUELAS DIGITAL DIALOGÓ CON UN ALLEGADO A LA FAMILIA DE LOS NIÑOS QUE AGUSTINA DEBÍA CUIDAR
Agustina Duhalde tiene 18 años. Trabaja de niñera cuidando dos niños de 3 y 7 años. Según nos manifestaron allegados a la familia de los menores la chica proviene de “buena familia”, cumplidora en su trabajo que mantiene desde hace casi un año en casa de Eliana, empleada de limpieza en el Cuenca. Tiene 4 hermanos a los que ayuda a cuidar cuando su mamá está muy ocupada. Nada hacía preveer un desenlace no deseado.
El domingo a la noche Agustina fue a trabajar normalmente. Eliana le dejó los hijos y se fue al trabajo y no podría imaginar que los menores estarían toda la noche “solos” ya que la niñera se la pasó en el baño según les dijo “curándose una herida en la pierna”. Los pequeños obviamente no entendían qué estaba pasando, y nada asegura que Agustina lo estuviera sabiendo. Eso sólo lo averiguará la Justicia en algún momento.
Pasó la noche. A las 6 de la mañana Eliana llegó a su casa y, sorprendida, vio que sus hijos estaban despiertos y llorando desconsolados. Le dijeron a su mamá que vaya a ver a la niñera al baño porque algo le pasaba. Eliana entró y la vio sangrando y todo el baño regado de sangre. Agustina le dijo que estaba cortada su pierna. Le dijo que se iba y se despidió normalmente pero dolorida. Eliana llamó a la mamá de la joven para sugerirle que la lleve al médico.
Los hijos de Eliana seguían desconsolados y confundidos. Hay mucha bronca en la familia por el daño recibido sin motivo por ambos niños.
Eliana, ya cerca del mediodía, andaba por la calle y escuchó un llanto de bebé. Ella misma encontró en el tacho de residuos el motivo de la confusión que había reinado esa noche en su casa. El resto es ya conocido. Tanto Agustina, como su bebé una hora más tarde, fueron atendidos en el Hospital Cuenca.
Hoy el bebé está estable pero sin recuperar su capacidad respiratoria total. Agustina, que hasta ayer estaba esposada a la cama, recibió del juez Rizzo la denegatoria de su detención. “No sabría de su embarazo y eso la llevó a una conmoción post parto” dicen en fuentes judiciales.
En tanto, la fuente familiar que nos permitió reconstruir lo sucedido, se debate entre la indignación, la pena por Agustina, y la bronca por el daño psicológico que sufrieron los menores a cargo de su niñera.